HABLEMOS DEL HADAS
El Hadas, es considerado otra de las cuatro especies (arba minim) que son utilizadas durante la festividad de Sucot.
Es conocido por todos el mandamiento donde está descrito el uso del hadas, para esta festividad:
Y tomaréis el primer día el fruto de árboles hermosos, hojas de palmera y ramas de árboles frondosos y sauces de los arroyos, y te alegrarás delante de El Eterno tu Dios 7 días! — Vayicrá / Levítico 23:40
Ulekajtém lajém bayóm harishón perí etz hadár kapot temarím vaanáf etz avót vearvéi nájal usmajtém lifnéi Adonai Eloheíjem shivát yamim.
Aquí, el Hadas tampoco aparece mencionado como tal: ya que está descrito, ramas de árboles frondosos…
La palabra hadas, entonces, es otra de las cuales ha sido introducida por nuestros sabios, para hacer parte del ramillete que se agita, en la festividad de sucot, como todos sabemos, en las seis direcciones
Cuando hablamos del “Hadas” nos referimos al mirto (Myrtus communis como lo es su nombre científico) planta arbustácea, perenne, de hasta 5 metros de alto, nativa del sur de Europa, el norte de África, el oeste de Asia, Macaronesia y el subcontinente indio.
Condiciones del Hadas
Las diferentes fuentes nos hablan que el ramillete, que hemos llamado lulav, debe contar con MÍNIMO tres ramas de hadass (mirto)…(Oraj Jaim y otros)
las condiciones que debe presentar esta rama, son las siguientes: debe abrir en ramilletes de tres hojas en cada nacimiento
Tres ramas en honor a los patriarcas
Debe ser de mayor tamaño que el sauce
Su punta debe estar intacta
NO DEBE tener frutos o su número ser menor al de las hojas
Se debe atar en el lado derecho del lulav, y según el REMA, esto se debe a que el mirto tiene más importancia que el sauce, por el hecho de tener aroma.
Se prohíbe disfrutar del aroma del mirto durante la festividad, porque este placer se deriva del Etrog
Su posición debe ser en dirección del crecimiento, ya que así se sobreentiende de la Torá: se deriva que. cuando se hace una mitzvá con algo que crece, ello debe ser orientado en el sentido de su crecimiento.
Shemot / Éxodo 26:15 Y harás para el Tabernáculo tablones de madera de acacia que se coloquen verticalmente.
Veasíta et hakrasím laMishkán atzéi shitím omedím.
Finalmente:
Repasamos nuevamente el concepto que, todas las explicaciones proporcionadas por la tradición judía son cientos de años más viejas que la práctica misma; quizás por ello no hay una explicación de la conformación del ramillete festivo y el uso del mirto: sin embargo, podemos apoyarnos en el verso que dice: “Los árboles del bosque cantarán delante de Adonai, Dadle gracias al Eterno porque es bueno”
También recordemos que todo esto tiene que ver con la temporada de las lluvias y el agua: ya habíamos mencionado que la temporada de lluvias en Israel comienza alrededor de Sucot, y que, en el Templo, en Sucot, se realizaba una ceremonia en honor a las lluvias, relacionada con el agua.
De cualquier manera, el ritual de sacudir el lulav, con todo su contenido, es una parte importante y hermosa de la festividad de Sucot, e independientemente de su significado, inspira a que cualquiera pueda tomarse el tiempo necesario para hacer una introspección y un arrepentimiento, al juntar plantas o elementos que simbolizan las partes primarias del cuerpo y que nos conectan con el Todopoderoso, al decir la bendición y al inclinarlas en las seis direcciones, estamos reconociendo que El Eterno está en todas partes alrededor de nosotros, y esto podría ser muy poderoso y muy beneficioso.
Jag Sucot Sameaj
08 de octubre de 2017 – 18 de Tishrei de 5778