Desaliento
Encontramos por Desaliento, en el diccionario de la Real Academia de la Lengua Española la siguiente definición
Decaimiento del ánimo, desfallecimiento de las fuerzas.
También encontramos que es: Un estado en el que una persona siente que sus fuerzas se debilitan cada vez más ante el peso un algo que considera muy fuerte, y que tal vez no sea capaz que soportar.
Este desaliento, es una energía negativa que generalmente conduce, de una forma lenta pero progresiva, hacia la pérdida de esperanza.
Cuando alguno de nosotros ha estado con desaliento, ha experimentado de un modo u otro, sensación de angustia, incertidumbre, preocupación, debilidad, pesadez, agitación, nerviosismo, desesperación, entre muchos otros estados.
El desaliento, cuando es profundo, es cuando bloquea las fuerzas físicas porque hay una enorme relación entre el cuerpo y la mente y, es allí cuando empezamos a manifestar lo descrito: “las fuerzas se debilitan o se desfallece”.
Es allí donde la parashá Vaerá nos describe la sensación del pueblo judío por lo que les está ocurriendo, siendo esclavos del faraón y así lo relata:
Shemot 6:9: Vayedaber Moshe ken el benei Israel veló shamú el Moshe mikótzer rúaj umeavodá kashá.
Aquí encontramos la palabra kotzer rúaj … literalmente podría significar un espíritu empequeñecido o recortado ya que kotzer comparte la raíz de katzar que es corto o pequeño
Traducido: Shemot 6:9 Y habló Moshé de esta manera a los hijos de Israel; mas ellos no escucharon a Moshé por impaciencia de espíritu, y a causa de la dura servidumbre.
Cuando uno se encuentra en un estado como el que se describe previamente, es muy difícil escuchar acerca de la probabilidad o la esperanza de algún cambio, una mejoría, ya que predominan otros factores como el miedo y la desilución.
Muy probablemente, y a pesar de todas las dificultades, puede estar diciendo y pensando:
“Me siento cómodo en mi estado actual. Por favor no me saquen de este aquí porque podría no soportar una decepción. Prefiero ser infeliz que el posible riesgo de la decepción”..
Muchas situaciones de desaliento hay en la Torá
por ejemplo, con la historia de Jonàs que dice así::
Y sucedió que al salir el sol, dispuso El Eterno un sofocante viento solano, y el sol hirió la cabeza de Jonás y él desfallecía, y deseaba con {toda} su alma morir, diciendo: Mejor me es la muerte que la vida.
O David, en sus Salmos / Tehillim diciendo, por ejemplo
Ten misericordia de mí, oh HaShém, que estoy en angustia; se han carcomido de pesar mis ojos, mi alma, y mis entrañas.
Porque se ha acabado mi vida con dolor, y mis años con suspiro; se ha enflaquecido mi fuerza a causa de mi iniquidad, y mis huesos se han consumido.
De todos mis enemigos he sido oprobio, y de mis vecinos en gran manera, y horror a mis conocidos; los que me ven fuera, huyen de mí.
He sido olvidado del todo como un muerto; he venido a ser como un vaso perdido.
Porque he oído afrenta de muchos, cerrado de temores; cuando consultaban juntos contra mí, e ideaban para prenderme el alma
Cualquier persona se pudo haber presentado a tratar de calmar al pueblo judío de esta situación, pero es muy bien sabido que no todo el mundo tiene las capacidades y las habilidades para hacerlo: dice un refrán:
cualquier marinero puede dirigir un barco en un mar en calma; pero no cualquiera,cuando aparecen las rocas, es capaz de esquivarlas
Pero llegó Moshé, a combatir ese desaliento, como lo haría cualquier psicólogo o terapeuta.
Trajo palabras de aliento, confianza en sí mismo.
Moshe fue un lider para este proceso:
¿Que fué dificil?
¡Si que lo fue!
Y como dice un refrán en el judaísmo:
Un líder no es necesariamente alguien que conoce el camino, sino uno que piensa que conoce el camino.
Y la Torá nos lo demuestra.
Además, hay muchos consejos hay también en la Torá que nos inspiran. que nos hablan, por ejemplo de autosuperaciòn, de confianza en nosotros mismos y por supuesto, de confianza en EL ETERNO,
por ejemplo
Sed firmes y valientes, no temáis ni os aterroricéis ante ellos, porque el SEÑOR tu Elohim es el que va contigo; no te dejará ni te desamparará.
El pueblo judío tuvo que descender mucho, desde el punto de vista moral, espiritual, para luego ascender, como lo hemos revisado en artículos previos, para luego hacerse merecedores de la Torá, la tierra prometida y ahora esperar la llegada del Mashíaj.
Y como personas, cada uno tiene un reto y una misión que cumplir.
Sabiendo que lo anterior hace parte de mandamiento Divino, cada persona debe estar resuelta a cumplir con ella, sin importar cuáles sean las dificultades.
De hecho, puede considerar los obstáculos que encuentra como un desafío que debe enfrentarse sin pestañear y superar.
Lejos de verse obstaculizados por tales obstáculos, ellos pueden reforzar la determinación y estimular a que cada persona ponga su esfuerzo al máximo grado.
Combatiendo el desaliento, se llega lejos .
Material de 321judaismo.com – Dr Max Stroh Kaufman
11 de enero de 2018