Nabucodonosor / Nebuchadenezzar
Nabucodonosor: ¿Quien fue?
Nabucodonosor, en español, Nabû-kudurri-u?ur en el antiguo idioma Acadiano (significando ‘Nabû protege mis niños / fronteras) o Nebuchadnezzar en hebreo, con estos nombres se describen a dos antiguos reyes del imperio Babilónico: el primero de ellos, Nabucodonosor I, fue el cuarto rey de la segunda dinastía de Isin y ella era la cuarta dinastía de Babilonia, fue gobernante entre los años de 1126-1103 Antes de la Era Común, fue conocido por su batalla contra los Elamitas (Elam (1) o región ubicada el en actual Irán y cuya capital fue Susa, donde ocurrió la historia de Ester y Mardoqueo) y por su actividad constructora.
El segundo de ellos, Nabucodonosor II, mencionado en los libros del TaNaJ, y lo encontramos en la haftará Bo, correspondiente a esta semana, era el hijo mayor y sucesor de Nabopolasar, quien recuperó a Babilonia luego de tres siglos de vasallaje al estado mesopotámico vecino, Asiria, y en alianza con los medos, persas, escitas y cimerios, que estaban establecidos en las ruinas de Nínive. Reinó entre los años 650 a 562 Antes de la Era Común.
Nabucodonosor II / Nebuchadenezzar, continuando el trabajo de su padre de la reconstrucción, tuvo como objetivo hacer de su capital, una de las maravillas del mundo. Antiguos templos fueron restaurados; nuevos edificios de increíble magnificencia fueron erigidos a los muchos dioses del panteón babilónico, y entre ellos, se le atribuye la construcción de los Jardines Colgantes, y la construcción de la Puerta de Ishtar, una de las ocho puertas que conducen a la ciudad de Babilonia.
Nabucodonosor II, en la literatura rabínica es conocido como el «maligno» (ha-rasha), era un hijo o descendiente de la reina de Saba por su matrimonio con Salomón, y yerno (hijo político) de Senaquerib, con el que participó en la expedición de los Asirios contra Ezequías, siendo uno de los pocos que no fueron destruidos por los ángeles ante Jerusalém (Sanhedrin 95). Esta maldad, está descrita en la literatura rabínica por hechos como que a los exiliados en su camino a Babilonia no se les permitió descansar ni por un momento, por temor a que, durante los descansos, lograran orar y esto permitiera que El Todopoderoso les ayudara; otro dato que se tiene es que, al llegar al Éufrates, celebró un gran banquete a bordo de su nave, mientras que los príncipes de Judá yacían encadenados y desnudos en el río; los rollos de la Torá que trajo de sus excursiones fueron rotos y con ellos elaboró sacos, que llenó de arena, y que le dio a los príncipes cautivos para que los cargaran.
También se describe que ordenó a los cantores del Templo a que su música litúrgica fuera agregada a la música de sus fiestas; sin embargo, ellos prefieren mutilarse sus dedos, o incluso a hacerse matar, en lugar de tocar su música sagrada en honor de los ídolos de Babilonia.
Nabucodonosor II se hizo temer tanto, que afirmo que mientras él estuviera vivo nadie podía atreverse a reír. En su arrogancia, en la que se consideraba a sí mismo como un dios, y habló de hacer una nube con el fin de entronizarse a sí mismo como un Dios en las alturas, pero una voz celestial le gritó: «¡Oh tú, sinvergüenza, hijo de un sinvergüenza, y nieto del malandrín Nimrod: el hombre vive setenta años o como máximo ochenta, tiempo que no puede ser comparado ni con la distancia de la Tierra a las medidas cielo, mayor de 500 años; ni con el espesor de las medidas del cielo como mucho, ni mucho menos con la distancia de un cielo hasta el otro «(Pesajim 94 bis,.. ?aguim 13a).
Nabucodonosor II, uno de los más poderosos y autocráticos de los antiguos gobernantes de Babilonia y zonas vecinas, se caracterizó por múltiples sueños (como los del faraón de Egipto), interpretados por el Profeta Daniel, ya que ningún otro de sus magos, sabios y hechiceros pudo hacerlo, historias ampliamente conocidas en el TaNaJ.
Nebuchadnezzar II, es también reconocido por las tres deportaciones del pueblo judío: La primera, «en el tercer año del reinado de Joaquín», lo que habría sido de alrededor de 605 Antes de la Era Común. La segunda deportación fue de alrededor del año 597 Antes de la Era Común, cuando el rey Joaquín y otros, incluyendo a Ezequiel, fueron quitados (2 Reyes 24: 14-16). La tercera fue, aproximadamente en el año 587 Antes de la Era Común, cuando la ciudad y el templo fueron destruidos (2), en el reinado de Sedequias (2 Reyes 25: 9-10).
¿Hay evidencia de este exilio? Si lo hay: El descubrimiento de unas trescientas tablillas cuneiformes en un edificio abovedado en cercanías a la Puerta de Ishtar en Babilonia, hace posible dar respuesta afirmativa a esta pregunta, porque en un estudio cuidadoso, porque ellas contienen listas de raciones de comida pagados a los artesanos y cautivos que vivían en o cerca de Babilonia durante este período, y en ellas en estas tabletas, asociados con otros cinco príncipes reales, está mencionado el rey Joaquín de Judá, escrito como Yaukin; una forma abreviada de su nombre, en la que se le describe específicamente como «rey de la tierra de Yahud.» Además, el pequeño estado judío estampaba manijas y monedas de plata con la leyenda «Yehud» en el año 592 antes de la Era Común.
Los últimos años de la vida de Nabucodonosor II fueron apaciguados y nublados por la lucha de la familia, y la historia nos relata que aunque uno de sus hijos le heredó el trono, no dejó ningún sucesor fuerte, que permitiera la continuidad del imperio: su hijo fue derrocado por un usurpador después de reinar solo 2 años. Babilonia, sin embargo, sobrevivió y fue visto por el historiador griego Heródoto, quien describió sus maravillas.
Esta fue una pequeña revisión acerca de la vida de Nabucodonosor / Nebuchadenezzar
(1) Elam fue uno de los hijos de Shem (hijo de Noé. Elam era la región fronteriza con el bajo Tigris en el oeste y con Media en el noreste. Susa, la antigua capital de Elam (ver Daniel 8:9), llegó en tiempos posteriores a ser una de las capitales del Imperio persa.
(2) Fecha calculada comenzando el 7 de Av del 3363 y terminando el 25 de Adar del año 3364.
25 de enero de 2015 – 5 de Shevat de 5775