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Paz interior en el judaismo

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Paz interior en el judaismo

Paz interior en el judaismo

Solemos hablar de paz interior cuando mental o espiritualmente nos encontramos en tranquilidad, con unas condiciones que le permiten a uno mantenerse fuerte, frente a la ansiedad o el desequilibrio emocional, independiente de la causa

Tener paz interior se considera altamente saludable y suele asociarse con la felicidad.

La paz interior significa, entre otras cosas, que no debemos pensar excesivamente ni analizar demasiado sobre cada situación. 

También quiere decir, que no hay que perder tiempo, energía ni atención en pensamientos que tienen poca o ninguna importancia, además de no tener sentido.

Paz interior, la podemos definir, además, como todo lo contrario a estar estresado o ansioso.

Es muy fácil hablar de paz interior, especialmente en estos tiempos convulsionados… sin embargo, para lograrla requiere de esfuerzo y compromiso, que no todos están dispuestos a adquirir o cumplir.

Y es un reto o un desafío que requiere que, cada uno de nosotros busque y/o encuentre una práctica o un sistema que coincida con su propia naturaleza y/o estilo de vida.

Vamos a hacer un pequeño análisis de lo que es paz interior:

Pero antes revisemos una frase de Cicerón que dice así:

La búsqueda, incluso de las mejores cosas, debe ser tranquila y pacífica.

O esta otra de Robert J. Sawyer:

Aprender a ignorar las cosas es uno de los grandes caminos hacia la paz interior.

Empecemos a hablar de paz interior en el judaismo: 

Supongamos que estamos en este momento, en nuestra habitación, la cual está repleta de muebles, libros, papeles y mucha basura. No hay espacio libre, y apenas si podemos movernos en ella.

En esta habitación vivimos y nos sentimos cómodos, a pesar de lo desagradable que puede ser, tanto por el aspecto, como por la congestión.

Y lo mejor, es que no hacemos nada para limpiar o reorganizar este lugar.

Asi podria ser el estado de nuestras mentes. 

Están repletas de pensamientos, miedos, preocupaciones y pensamientos interminables. sin dar cabida o espacio para pensamientos nuevos y diferentes. 

Eso provoca un estado de tensión y estrés, en el que literalmente, estaríamos siempre saltando de un pensamiento a otro, como una mariposa saltando de una flor a otra.

Imaginemos que un día decidimos limpiar tu habitación.

Sacamos todo de nuestra habitación, vaciándola por completo. 

Ahora, la misma habitación, se ve mucho más grande ya que todo lo que contenía, no está.

Se le limpia, se le lava, y se organiza, pero en esta ocasión, solo se van a dejar las cosas esenciales. 

¿Acaso esto no genera un sentimiento estimulante, y de alegría? 

Todo porque se amplía la capacidad… hay sensación de mucho espacio, y todo lo que necesitamos, lo podemos encontrar, fácilmente.

Ya no estamos en estas un entorno limitado y abarrotado. y eso nos da una sensación de libertad y más control sobre nuestras vidas.

¿Habremos perdido algo importante en este proceso? 

No, definitivamente, no.

Solo ganamos mucho.

Lo mismo sucede con nuestra mente. 

Cuando la vaciamos de pensamientos, miedos y preocupaciones innecesarios, entonces disfrutaremos de la paz interior. 

En definitiva, podremos pensar más claramente y estaremos más enfocado.

La pregunta es: 

¿Y cómo podemos convertir esa paz interior en un hábito?

Los métodos son muy variados, por supuesto, cada cual tendrá que buscar el que más se adapte a su personalidad. 

Porque la paz interior nos conduce a una mejor salud emocional y física, mayor energía, poderes mentales más fuertes, mejor memoria y una mejor capacidad para aprender y estudiar. 

También nos ayuda a manejar nuestros asuntos cotidianos de una manera más eficiente, alivia el estrés y le permite actuar con calma y equilibrio en situaciones difíciles.

Nuevamente: 

Se desarrolla gradualmente, a través del entrenamiento.

Por ejemplo: 

Practicando la meditación a diario, aunque sea solo por unos minutos, 

Repite afirmaciones sobre la paz y, eventualmente, tu mente las aceptará y se volverá más pacífica. 

Afirmaciones tales como:

«Estoy tranquilo y relajado en cada situación».

«Día a día, mi mente se está volviendo más pacífica».

«Mi capacidad para calmar mi mente, pensar con claridad y concentrarme agudamente mejora cada día».

¡La práctica diaria es lo más importante!

Al final, 

Al final lograremos que nuestra mente logre permanecer tranquila y no agitada, ante cualquier evento, y esto, en definitiva, es lo que estábamos buscando, que es la paz interior.

Y ….

¿ Que dice el judaismo acerca de la paz interior?

Según el judaísmo la paz interior no es la eliminación del estrés y el conflicto de nuestras vidas. 

Hay muchos conceptos al respecto

El rabino Adin Steinsaltz dijo que

“En nuestra sociedad, los conceptos de tranquilidad, relajación y paz están siendo vistos como los ideales más importantes en nuestras vidas, constituyéndose en una prioridad para cada uno de nosotros”

Si esto se mira desde el punto de vista industrial, es un negocio donde se mueven billones de dólares, en busca de dicha tranquilidad.

Y nuestros rabinos dicen que

“Hashem no ha encontrado otro mejor recipiente que la paz, para contener las bendiciones de la vida” 

El rabino Salanter dijo: 

Mientras uno viva una vida de calma y tranquilidad al servicio de Hashem, es bastante claro que la persona está alejada del verdadero servicio.

A esto se le deberían agregan las palabras de Moshe Jaim Luzzatto que dijo nuestras vidas realmente están definidas por conflictos, luchas y dificultades.

No estamos en un mundo de paz.

No hay en nuestras vidas espirituales, momentos de tranquilidad y momentos de angustia y tribulaciones, sino que constantemente hay luchas y dificultades, comparando nuestras vidas con las aves… una vez empiezas a agitar las alas, no las puedes doblar.

La paz interior no significa el fin de nuestros sufrimientos: ella es una cualidad interna que nos mantiene enfrentándonos con estos con estas dificultades y la calma llega cuando podemos superar todo aquello que nos rodea y con esa clase de equilibrio, estamos en control de nuestras mentes y tenemos la libertad para encontrar las dificultades de la vida con gracia, y felicidad.

Algo más?

Paz en hebreo es Shalom, que está relacionada con shlemut, perfección porque nuestra paz interior se logra cuando abrazamos el viaje para trabajar en nosotros mismos y hacia la perfección de nosotros mismos.

El Gaón de Vilna dijo:

El propósito completo de nosotros es, en esta tierra, el de trabajar en la perfección de los diferentes caracteres de nuestra personalidad

Literalmente dicho, con las palabras que recibió Abraham, es Lej Leja. con ello se te revelara, el camino para que encuentres a tu verdadero ser.

En este camino estaremos realizando un trabajo que finalmente, nos llevara, a la paz interior.

Todas las dificultades que encontremos en el camino nos formaran, al sobrellevar las dificultades, los bloqueos en el camino, lo que no permite el crecimiento espiritual, a esa paz interior.

Estas son algunas frases que encontramos en la literatura rabínica nos pueden ayudar a comprender este proceso…

Estas frases son:

1.- El pensamiento positivo atrae resultados positivos.

(Rabino Menajem Mendel, Tzemaj Tzedek de Lubavitch)

2.- Aprecia y agradece la bondad en tu vida. (Pirke Avot 4: 1)

3.- Lo que quiera que hagas, tiene efecto de ondas en el mundo: por lo tanto, ama intensamente… se feliz: despierta tu conciencia y tu espiritualidad; medita y permite que tu alma ascienda a niveles superiores para que te conecte con la paz interior.

4.- Vive en el presente, no en lo que «podría ser» o «podría haber sido». (Pirke Avot 1:14).

5.- No juzgues a los demás hasta que estés en su lugar. (Pirke Avot 2: 4).

6.- Reconoce que la felicidad es el viaje, no el destino. (Pirke Avot 4:16)

7.-  Conoce tus fortalezas y debilidades. (Rabino Shalom DovBer, el “Rashab»)

8.- La naturaleza del alma humana es la de seguir el camino correcto, y mientras tu alma no se destruya por completo por el pecado, el sentido de lo correcto energizará tu corazón … para que regrese y corrija sus distorsiones” (Rabino Abraham Isaac HaCohen Kook)

Recordemos: 

Sin paz interior, una persona está ansiosa, confundida y sufriendo. 

Sin paz comunitaria, cada persona está aislada, separada y separada. 

Sin paz global, nuestro mundo permanecerá en pedazos, fragmentados y fracturados. 

La necesidad de un todo unificado y armonioso existe en una persona, en una familia, en un pueblo y en todos los pueblos. 

Conclusiones:

Entrena tu cuerpo para que esté en sintonía con tu alma.

Usa la disciplina.

Fija metas o ideales altos y enfócate en ellos… puede tomar un tiempo, pero no distraigas tu mente en otra cosa

La paz interior se da cuando cada parte de ti y cada faceta de tu día se mueven en la misma dirección.

Cuando tienes un propósito, tienes paz.

Finalmente. entrena a otros

Si logras liberar el potencial de otro, entonces tú mismo has alcanzado la grandeza. En hebreo esto se conoce como Midá Maamidó al HaShalóm

Si tenemos éxito en hacer grandes a los demás, nos convertimos en grandes nosotros mismos.

Por supuesto, esto es lo que aprendemos de paz interior en el judaismo

Redactado, recopilado, elaborado, traducido, según corresponda, por Dr Max Stroh Kaufman para 321judaismo.com

14 de marzo de 2020 – 18 de Adar de 5780

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