Aprender a Dar
Nuestros sabios nos han enseñado, de diferentes maneras que, haciendo las cosas bien, nos convertiremos en una fuente de bendición para todos los que nos rodean.
Y ¿Como es eso?
Cuando aprendemos a dar y no solo a recibir.
El problema está en que, desde pequeños nos han enseñado a recibir más que a dar. Cuando somos adultos, por lo general ya estamos acostumbrados a la sensación de recibir, porque ello nos produce felicidad;
Sin embargo, y sin darnos cuenta, en muchas ocasiones, pronto queremos más y más.
El problema es que debemos también aprender a dar, y a sentirme feliz, conmigo mismo y con los demás, cuando doy.
https://youtu.be/QcXa510c60k
¿Por qué?
Porque si tengo como objetivo en mi vida el de ser feliz, entonces, mientras mejor me sienta, mayores oportunidades tendré de ser exitoso.
Esto es comparable con el acto de amar:
El amar atrae más amor, la abundancia crece con más abundancia, el agradecimiento es retribuido con cariño y mayor gratitud.
¿Tu quieres amor? ¡Da amor!
Quieres consejo? ¡Da consejos!
¿Necesitas un impulso de energía? ¡Aumenta el nivel de energía de otra persona y al hacerlo sentirás que tu propia energía aumenta!
¿Quieres que la gente te escuche? Luego, primero escucha atentamente a alguien que necesita ser escuchado.
¿Deseas más amigos? ¡Entonces hazte amigo de los demás!
¿Quieres más respeto de tus hijos? ¡Respétalos!
Entonces, para obtener lo que quieres, aprende a dar primero.
En lugar de esperar a que tu pareja te dé amor, ¿Por qué no le das amor?
En lugar de esperar a que tus hijos te respeten, ¿Por qué no comienzas a respetarlos? Se un ejemplo.
¿Quieres un lugar de soñar con un trabajo maravilloso que satisfaga sus necesidades? ¡Trata de ser maravilloso en su trabajo actual primero!
¿Anhelas que tus amigos inviertan tiempo y energía en tu relación? ¿Por qué no les das tiempo y energía extra?
Si deseas esperar que la paz y la calma entren en tu vida, ¿por qué no creas el silencio y el equilibrio interno necesarios para sentir la paz que anhelas?
Recordemos lo aprendido en una enseñanza previa:
La Mishná (Sota 1: 7) nos trae a colación aquello que dice que «bemida sheadam moded kaj modedim lo», es decir, una persona estará sujeta al mismo estándar de juicio que usa para juzgar a otros.
Porque hay que dar sin medir.
Da por placer.
Dar porque espontáneamente sale de cada uno de nosotros.
Hazlo porque así eres tú y así lo sientes.
Sin más vueltas.
Y sobre todo, nos enseña y nos acostumbra a quedarnos con las cosas buenas de la gente.
Y el Tanaj nos enseña en Mishlé / Proverbios 3:27-28
“No retengas el bien de quien lo necesita cuando tienes poder en tu mano para hacerlo.
No le digas a tu compañero: «Ve y vuelve, y mañana te lo daré», aunque lo tengas contigo”.
O este otro también en Mishle / Proverbios pero el 11:25
“Una persona generosa se hará rica, y el que sacia [a los demás] también se saciará”.
Y uno más en Nejémia / Nehemias 8:10
Y él les dijo: «Ve, come alimentos grasos y bebe bebidas dulces y envía porciones a quien no tenga nada preparado, porque el día es santo para nuestro Señor, y no estés triste, porque el gozo del Señor es tu fortaleza. «
Aprender a dar, es complicado, especialmente cuando uno no esperar recibir; es todo un proceso de emprendimiento que, como tal, requiere de entrenamiento. Y valga la repetición del concepto:
Dar es maravilloso,
Pues mientras más demos, más cerca estaremos de cumplir con nuestros propósitos y de llegar a la meta.
La generosidad cultiva el alma, y atrae una mentalidad positiva a nuestras vidas.
Médicamente hablando, El dar activa el centro de placer en tu cerebro, y literalmente construye nuevas fuerzas físicas
Aprender a dar funciona para todo lo que desees.
No solo obtendrás lo que deseas al dar, sino que también serás mucho menos dependiente de los demás.
¡Sentirás el poder de estar a cargo de tu propia vida!
Aprende a dar
21 de febrero del 2020 – 26 de Shevat de 5780