¿QUIÉN YO SOY?
Pregunta muy complicada.
Ese “¿Quién soy yo?” puede ser tan simple, como el hecho de decir que sólo son dos palabras, pero quizás es una de las frases más habladas, en todo el mundo y por todas las personas
YO SOY.
Pensemos: ¿Cuántas veces al día decimos la frase Yo Soy?.
Sabemos que en la respuesta va a influir cada opinión que tenemos de nosotros mismo … cada opinión que los otros tienen de nosotros se crea y se basa en lo que constantemente proyectamos a los otros y también nos estamos diciendo.
Todo lo que siente comienza con las palabras «Yo soy».
Las inseguridades y las consecuencias de la baja autoestima pueden ser paralizantes y difíciles de superar y generalmente son de lo que hemos escuchado o experimentado a lo largo de nuestra vida.
Ellas se han internalizado tan profundamente en nosotros, que se convierten en creencia.
Creencia que hemos generalizado llegando a quedar como si fuera “la última palabra”
Hay palabras que nos llegan a nosotros y, la mayoría de las veces, en lugar de estimularnos, producen el efecto contrario y nos conduce a la baja autoestima:
El problema consiste en que ellas proviene de fuentes externas, que hacemos es internalizarlas, y las terminamos creyendo.
Entonces, creemos lo que escuchamos … creemos lo que tocamos … Creemos lo que experimentamos. Ejemplos como estos, son muy frecuentes:
“No vales nada … eres un fracaso … nunca haces las cosas bien hechas … no eres capaz… no sabes vestirte… Nadie me entiende… Todo me sale mal, etc”.
Cosas como esas, que escuchamos con frecuencia, y que sentimos desde la concepción en la ayuda forman la imagen de nosotros mismos, por lo tanto, van a influir en las decisiones que tomamos.
Toma la frase YO SOY y síguela con cualquier adjetivo que se te ocurra para describirte a ti mismo.
No con los que bromeas con tus amigos, sino con tus pensamientos desenmascarados sobre quién eres y cómo te sientes.
Ahora repítelos en tu mente y experimenta cómo te hacen sentir.
Si te sientes bien … si te sientes cálido, entonces estás cerca.
Si te sientes triste o vergonzoso, herido o impotente, consuélate con el hecho de que solo se trata de ti mismo. Ese NO eres tu.
Ahora veamos lo que la frase YO SOY trae en su intención espiritual.
Cuando Moisés subió a la montaña y habló con El Eterno (1) y Él, simplemente, le dio las instrucciones de ir al Faraón para liberar a los israelitas, Moisés, de pronto de una manera inocente le dice: “Pero me preguntarán el nombre de Aquel que me envió”.
¿Qué les digo?
El Todopoderoso, simplemente le volvió a recordar la frase que debía decir: «YO SOY EL QUE SOY»;
Además, Él dijo: «Así dirás a los hijos de Israel:» YO SOY me envió a ti ««.
YO SOY QUIEN SOY estoy afirmando que soy TODO … soy existencia … soy poder … soy la fuente…
Soy creación
Y si tomas la frase YO SOY… Finalmente, el usar estas dos palabras como un nombre propio, es algo que puede creerse, que fue con total intención, y es simplemente la capacidad de afirmar que YO SOY.
Este fue un mensaje directo tan intencional que si realmente escuchas no puedes referirte al Padre Celestial, sin que tengamos que referirnos a nosotros mismos, y a la vez, a todo en el universo: a todo lo que es pasado, presente y futuro.
El Eterno es poder, YO SOY poder.
El Santo, bendito sea su Santo Nombre, eligió el nombre YO SOY por la simple razón de que cuando se pronuncia su nombre, nos da a entender que cada uno de , cada criatura, cada ser, está involucrado allí y ello permite que Su Nombre y Su Ser se expanda a todo en el universo.
Formulemos estas dos preguntas:
¿Si piensas que Dios no existe, si crees que es ficticio, que no es posible ni hay seguridad acerca de Él o Su existencia, qué sientes acerca de eso?
O esta otra:
¿Cuáles serían algunos de los adjetivos que usarías para describirlo?
Cuando lo aceptamos, o aceptamos su existencia, generalmente pensamos que Hashem representa el poder, la creación, la iluminación del amor, el Todopoderoso, el omnisciente.
Si tuviéramos que referirnos al Padre Celestial, con cualquiera de estos rasgos, parecería y seguramente llegaríamos a una conclusión en la que entendemos que El Eterno es y representa poder, La creación y todo lo que ella trae; Es el amor desde todo punto de vista; Es iluminación.
Ahora, en lugar de usar la palabra que El Creador se llamó por lo que Él mismo declaró que su nombre era … ESTOY.
Ahora se convierte en YO SOY poder, YO SOY creación, YO SOY amor, YO SOY iluminación, YO SOY omnisciente.
Tenía que estar en la sabiduría infinita de Dios, esto fue intencional.
Podría haberse referido a sí mismo como cualquier cosa, de cualquier manera, pero en cambio eligió las palabras YO SOY.
No hay mayor evidencia de que todos somos una sola energía y que todos estamos aquí como parte del propósito mayor.
Él sabía que lo sostendríamos en la luz más grande y cuando se piensa o se habla de Él de esta manera, tenía la intención de inspirarnos, porque no podemos alabar al Santo, bendito sea su nombre, sin alabarnos a nosotros mismos.
SOY increíble;
SI, lo soy: pero teniendo en cuenta que se nos ha dado la opción de aceptar esto, también se nos ha dado la opción de NEGARLO degradándonos, a nosotros mismos, o cuestionando la autoestima con pensamientos como “Soy un fracaso” o “No valgo nada”.
Ten mucho cuidado porque, desafortunadamente, este tipo de frases son muy comunes en la mente de hoy.
Lo que estás insinuando con esas frases, esa postura, ese pensamiento, es que El Creador del Universo es un fracaso en tu vida; que Él no vale ABSOLUTAMENTE NADA en TU vida.
Para estar de acuerdo con esos pensamientos, la mayoría de las personas que admitirán pensar tales cosas, porque probablemente también estén familiarizadas con el pensamiento:
“El Eterno está demasiado ocupado en otros asuntos, y por ello no responde mis oraciones. El Eterno no se preocupa por mí «.
Es muy triste encontrar personas con este tipo de pensamiento: en ocasiones, podríamos decir y sentir que somos los únicos, pero sucede lo contrario: hay muchas personas involucradas en este modo de pensar
Y ¿Qué pasa?
Pues, habrá consecuencias, no sólo para nuestras acciones, sino también para nuestros pensamientos.
Debemos tomarlos por lo que son y aceptarlos como parte de nuestra existencia si alguna vez van a ser nutridos o superados.
Cuando podemos aceptar la verdad, creyendo que TODOS somos una sola energía y que TODOS somos parte de un propósito mayor, esto nos permitirá lograr un mundo sin odio, un mundo sin prejuicios.
Aceptemos que todos somos uno con Adonai, y que todas nuestras experiencias y pensamientos son igualmente importantes para nuestra existencia y crecimiento.
Esto permite la aceptación y el amor de cualquiera y de todos.
Démonos cuenta de que cada persona, la conozcas o no, haga parte de tu entorno o no, esto es simplemente, una forma o manifestación de tu comienzo, hoy, tu presente y tu futuro.
Una vez que esta comprensión se siembre en tu conciencia, trata de degradarte sin sentir que también estás degradando al Creador.
Ahora, “haz lo contrario”; alábalo a Él usando Su nombre y mira a ver si esto no logra inspirarte. YO SOY QUIEN SOY.
YO SOY
Dos palabras, que tienen tanto poder porque Hashem dice que YO SOY todo, YO SOY creación, YO SOY tú.
Esto automáticamente significa que soy tú, tú eres yo, todos somos Dios. Las experiencias que recopilamos aquí en cada vida están encerradas para siempre en la conciencia colectiva de Dios. Al final, serás parte de todo lo que odias y todo lo que amas. Será tu existencia.
Dos palabras, YO SOY.
Si fuera aceptado por cada alma en la tierra, esas dos palabras podrían traer la paz mundial.
Esas dos palabras podrían acabar con el hambre y el sufrimiento del mundo. El sufrimiento es una creación del hombre.
Soy responsable,
Todos somos responsables de las experiencias terrenales creadas aquí. Pensar en Dios como nosotros mismos nos hace responsables de cada atrocidad y cada acto contra la humanidad, pero también nos permite alegrarnos de todo lo bueno, el amor y la aceptación.
Superar las atrocidades crea crecimiento.
Nos permite ver toda la gloria, todo el amor, toda la belleza que la vida puede ofrecer.
Todos experimentamos la vida de manera diferente.
Nuestras futuras experiencias sobre quiénes seremos serán los comienzos de la concepción.
Un bebé es una interpretación de las experiencias y emociones de una madre durante su embarazo.
Nuestras primeras experiencias contribuyen a las decisiones que tomamos en nuestra vida futura.
Ya sea que decidamos abrazarlos, caer ante ellos o vencerlos, el hombre es el ser más poderoso de la tierra porque somos la encarnación de Hashem, de cada figura espiritual representada en la religión antigua y moderna.
Somos La Unidad, somos la existencia del pasado, presente y futuro.
Si esto pudiera ser realizado por todos, podríamos aprovechar el poder del universo, el poder de Dios.
Abrazar la unidad con Dios crearía automáticamente la paz mundial.
SOY QUIEN SOY.
Siempre he escuchado a la gente decir, a juicio de (Papá) Dios,
«¿Cómo puede Hashem permitir tanto dolor y tanto sufrimiento?»
A eso diría: «Sí, ¿cómo podemos?»
¿Cómo podemos remediarlo?
Aprovechemos este mes de Elul, de reflexión, para encontrar el camino y hacer parte de una solución que podríamos colocarle el nombre de Tikun Olam, o sea, para nuestro propósito, la reparación del mundo, la cual cada uno de nosotros es responsable de ello.
- En este artículo, teniendo en cuenta la orientación judía que se le ha dado, se utilizan nombres “clásicos, en español o en hebreo”, para referirse a ese ser, respetado por todas la creencia religiosas, pero para poderlo reproducir en otros lugares, se puede utilizar otros términos como Dios, Jesús, la Fuente, La Energía del Universo, Allah, Jehová o cualquier otra denominación semejante de acuerdo con cada creencia personal.
15 de septiembre de 2019 – 15 de Elul de 5779