10 cosas que seguramente no sabías de la Parashá mishpatim
Según el orden establecido para la lectura de las parashiot, nos corresponde, esta semana, la número 18 del total de 54 y a al vez, la sexta del libro Shemot,
En la parashá que leemos en esta semana, vemos que, recibimos una serie de instrucciones, las que nos van a regir nuestro comportamiento diario… las hemos llamado Mishpatím, palabra que significa juicios, ordenanzas, leyes, que son, en un total de 53, y las cuales las podemos dividir en:
- Negativas (aquellas que comienzan con un NO por ejemplo: No maldecir a los jueces) y
- Positivas (que inducen a una acción, por ejemplo, Prestar a los pobres e indigentes)
- Las positivas son 23 y las negativas, 30
Continuemos nuestra serie sobre 10 cosas que no sabías de, para mencionar, precisamente, las 10 cosas que no sabías de la Parashá Mishpatim.
Orden descendente.
Número 10
Mishpatim, visto desde un punto de vista tradicional, hacen parte del concepto mitzvot:
ellas, como por ejemplo “el mandamiento de dar caridad o las prohibiciones contra el robo y el asesinato”, por su razón y su utilidad,caen dentro de la categoría de “mitzvot racionales” o de fácil comprensión y entendimiento…por ejemplo si se comparan con la mitzva de la “Para aduma”
Número 9
A pesar de lo anotado en el punto anterior, no existen categorías especiales de leyes o mandamientos. No hay nada que lleve a instancias de cumplimiento de normas superiores a otras. Todas son iguales: Esto se dio para que no aparecieran grandes personajes, que dijeran que ellos y nadie más encarna las virtudes del bien, en el cumplimiento de las normas más excelsas.
Número 8
La celebración de las tres fiestas de peregrinaje están descritas aquí: una de ellas, que conocemos con el nombre de Pesaj, recibe también el nombre de La fiesta del pan sin levadura (Jag HaMatzot)
Sin embargo, Algunos explican que la doble nomenclatura de «Pascua» y «Fiesta de los Panes sin Levadura» se refiere a dos fiestas separadas que el pueblo de Israel decidió combinar, en algún momento
Algunos creen que la «Fiesta de los Panes sin Levadura» fue una fiesta agrícola en la que el pueblo de Israel celebraba el comienzo de la cosecha de granos. En medio de esa creencia, aceptan que Moshé pudo haber tenido este festival en mente cuando le pidió a Faraón que dejara ir a los israelitas para celebrar una fiesta en el desierto.
Pesaj o,«Pascua judía», por otro lado, se asoció con un sacrificio de acción de gracias de un cordero, el cual seria conocido como «la ofrenda de Pascua».
Mientras que el Pesaj se celebraba el 14 del mes, la fiesta del pan sin levaduras se celebraba durante 7 días consecutivos y eso, al final, produjo que convergieran en una sola festividad
Número 7
Aprender a DAR
En la parashá mishpatim encontramos una ley acerca de los pozos, que dice así:
Si una persona descubre o cava un pozo … y un buey o burro cae en él, aquel responsable por el pozo debe pagar [por el daño]
Nuestros sabios nos enseñan que esto aplica tanto para pozos como para barreras elevadas que a veces se usan para señalar algo que hay más adelante, generalmente algo de cuidado, de riesgo o peligro…
Espiritualmente, un pozo se asemeja nuestra capacidad de recibir…
¡Y una barrera, a nuestra capacidad de dar!
Esta en nosotros escoger que vamos a hacer…
Si elegimos aceptar sólo influencias positivas (recibir) y difundimos (dar) sólo positivismo a nuestro alrededor, nos convertiremos en una fuente de bendición para todos los que nos rodean.
¡Aprendamos a dar!
Sin importar que DAR y RECIBIR son aspectos diferentes de lo mismo.
Y al menos podemos citar, de lo que nos han dejado nuestros sabios, 10 mandamientos, que ya evaluamos en una leccion previa.
Número 6
Lo que nosotros conocemos como los aseret hadibrot o los diez mandamientos, fueron entregados en Sinaí…. Y los mishpatim también…
Nuestros sabios nos dicen que, teniendo en cuenta que las dos fueron entregadas en Sinaí, las dos son igual de importantes.
No hay prelación de uno sobre el otro.
Número 5
En mishpatim encontramos “Y quien maldiga a su padre o su madre seguramente será ejecutado. (Shemot 21: 7)
Pero en la parasha pasada encontramos, entre los 10 mandamientos, Honrarás padre y madre…
¿Cual es la razón para que esto se repita, en forma tan seguida?
Sabemos que honrar y temer a los padres se considera como la preparación para honrar y temer a HaShem.
Pero resulta que, en el comienzo de la infancia, los niños aún no poseen la capacidad de apreciar a sus padres por lo que son…
Todos nos preguntamos:
¿Qué es bueno o qué es malo para ellos, a corto y a largo plazo?
Pero, quizás, muchos padres, por querer hacer lo mejor, terminan haciendo cosas que puede ser demasiado tarde cuando descubren cuán dañino fue para sus hijos las cosas que hicieron o no hicieron mientras los criaban.
Porque “cuando crezcan, se olvidarán de todo»
Pero sucede que, para cuando sus hijos hayan crecido,esta mala crianza ya se habrá convertido en parte integral del enfoque de la vida de sus hijos, para bien o para mal, pero, generalmente es para lo último.
Entonces llega el posible momento de “maldecir a los padres”
Y es ello el porque… un hijo siempre deberá ser respetuoso y honrar a padre y madre.
Número 4
Ver y mirar… Oir y escuchar… Estar y no estar
Muchas veces se nos dan instrucciones, por ejemplo la de ¡Ve y mira! pero terminamos no haciendo ni la una ni la otra
A Moshé se le dijo: Sube a Mí al monte, y estate allí…
La razón para esta doble acción, doble afirmación era para que principalmente Moshé, y obvio, todo el pueblo de Israel después, a que “Estén completamente presentes en espíritu, con la mente y los sentidos abiertos: esfuércense y concéntrese al máximo, en la experiencia que están viviendo y sintiendo en ese preciso instante, y que podamos ser nosotros, de manera total, y el triunfo de la experiencia sea primordialmente espiritual”.
Número 3
La entrega de estos mishpatim nos obliga, de alguna manera, a dejar de pensar en que «yo no soy religioso, pero soy una buena persona: no robo, no mato, cumplo mis obligaciones como ciudadano»
Es ir más lejos que eso…por ejemplo, cuando se dice que no se debe afligir a las viudas y a los huérfanos, porque hasta los delincuentes tienen sus propios códigos.
Al darnos estos mishpatim, El quiere que “dejemos la lógica a un lado, que amemos su palabra bajo los mandatos divinos que nos acaba de entregar, para poder así, garantizar una armonía plena entre los seres humanos”.
Número 2
La porción de la Torá de esta semana incluye la regla «ojo por ojo», que implica la retribución por los daños que uno ha causado a otro: nuestros sabios siempre han dicho que no tiene ningún valor práctico para la parte lesionada, afectar a otro por ejemplo, lesionando un ojo por otro ojo y que ciertamente no restablecería las pérdidas causadas por dichas lesiones.
La Mishná (Sotah 1: 7) enseña que «bemida sheadam moded kaj modedim lo», es decir, una persona estará sujeta al mismo estándar de juicio que usa para juzgar a otros.
Cada uno de nosotros tiene el desafío de reconocer que seremos juzgados y tratados con los mismos estándares con los que conducimos nuestras vidas.
El Todopoderoso exigirá retribución en consonancia con los estándares de juicio propios.
Si una persona intencionalmente daña a otra, la corte celestial exigirá el pago.
Si una persona ve injusticia pero mira hacia otro lado, la corte celestial mirará hacia otro lado cuando juzgue su alma.
Y si uno ha traicionado la confianza de los demás, uno puede esperar una retribución exacta cuando se enfrente a la justicia divina.
todos seremos enfrentados a compensar, medida por medida, si no es en este mundo, en el Olam Haba.
Dijo El Sabio Talmúdico, Rava, que la Corte Divina algún día nos preguntará a cada uno de nosotros:
¿Llevaste a cabo todos tus actos con fidelidad?
Debemos tener esta pregunta firmemente en mente para que la podamos responder sin tener vergüenza.
Número 1
Segundas oportunidades
La Parashá Mishpatim enumera muchos “delitos capitales” por los cuales el perpetrador «seguramente debe ser ejecutado».
Porque la Torá escrita por entregada por Nuestro Creador, es muy exigente…
Estipula que la desviación del comando Divino debería traer un juicio duro, que incluso lleve a la muerte misma.
Pero, lo que fueron desarrollando nuestros sabios, a partir de la comprensión de la misma, fue la bendición que Hashem nos da a diario.
Gracias a ello, tenemos segundas oportunidades.
Es por eso que la pena de muerte, a menudo obligatoria por la Torá, rara vez se llevó a cabo.
Estas segundas oportunidades, nos deben dar la conciencia que la justicia de la Torá de Hashem es estricta, pero a la vez misericordiosa para que apliquemos todos sus conceptos en nuestra vida diaria.
Terminamos asi, la revision de 10 cosas que seguramente no sabias de la Parasha Mishpatim.
Redactado, elaborado, resumido, traducido, adaptado y modificado según el caso, por Dr Max Stroh Kaufman para 321judaismo.com
19 de febrero de 2020 – 24 de Shevat de 5780