LA HOSPITALIDAD (DE ABRAHAM):
Uno de los temas que aborda una de las últimas parashiot que hemos revisado, es la hospitalidad de Abraham
En hebreo, hospitalidad la describimos a través de las palabras hajnasat horjim
Ella es considerada como una mitzva que acrecienta la amistad y la unión dentro del pueblo de Israel,
Es porque al invitar a quien necesita un lugar donde estar, estaremos provocando que en el futuro nuestro invitado haga lo mismo con otro judío necesitado.
Definición
El diccionario nos da algunas ideas de lo que significa hospitalidad:
1.- Acoger y asistir a los necesitados
2.- Recibir afectuosamente a los visitantes
3.- virtud de alojar en su casa, en forma gratuita, a aquellos que no lo necesitan.
Por naturaleza, nos damos cuenta que al ser humano le cuesta mucho trabajo brindar hospitalidad:
Sin embargo encontramos en las parashiot, una disposición completamente distinta en Abraham
Todo por encontrarse en 2 condiciones que podrían catalogarse como adversas: la primera, el calor y la segunda, el dolor que le podía generar el estar en un proceso de recuperación posterior a la Brit Mila.
Veamos la situación:
Y a pesar de que ese tercer día el calor era agonizante, Abraham nuevamente se sentó en la puerta de su tienda, esperando que pasara alguien para poder invitarlo a su casa.
Abraham vio que a lo lejos pasaban caminando tres personas por el desierto (en realidad eran tres ángeles que le había enviado Adonai) y fue al encuentro de ellos.
Él les suplicó que se desvíen de su camino para comer, beber y descansar en su tienda, antes de seguir el duro viaje.
Al comienzo
Al comienzo, ellos dudaron en aceptar, pero tras la insistencia de Abraham accedieron a su ofrecimiento.
Allí dice el versículo:
«…y hacia el ganado corrió Abraham» (Bereshit / Génesis 18:7).
Y a Sará – su esposa – le dijo que se apresure en hornear tortas para agasajar a los huéspedes.
Allí dice el versículo: «…y hacia el ganado corrió Abraham» (Bereshit / Génesis 18:7).
Y a Sará – su esposa – le dijo que se apresure en hornear tortas para agasajar a los huéspedes.
El Talmud en su tratado de Shabat nos dice: «Quien cumpla la Mitzvá de hajnasat orjim disfrutará de sus beneficios en este mundo y en el mundo venidero».
Dos conceptos básicos encontramos en los diferentes textos que nos indican como podemos cumplir con esta mitzva:
Uno de ellos lo encontramos en la Mishna, la que nos dice que “tengamos una buena cara para recibir a la gente”;
La segunda esta en el libro de Mishle / Proverbios en la que Shlomo, con toda su sabiduría, nos recomienda:
“Es mejor dar un pan duro con una sonrisa, que dar los más ricos manjares con mala cara».
Esto es lo que nos enseña Abraham Avinu, pues sus puertas siempre estaban abiertas para recibir visitas.
Ponía lo mejor de sí, para que se sientan cómodos y confortables.
Además, cuando Abraham invitaba a las personas a su tienda, les decía:
«Vengan que les daré un poco de comida».
Pero cuando ellos ya estaban sentados, él los agasajaba de la mejor manera, ofreciéndoles manjares en gran cantidad.
En los textos
El Talmud, la Mishna y otros libros en los cuales nuestros sabios han dejado expresas sus enseñanzas,
Ellos nos hablan incluso de la forma como Abraham hacia pagar a aquellas personas que no demostraban la gratitud necesaria a su gesto de cordialidad y hospitalidad.
Sin embargo, lo que nos quiere dejar esta parasha es la intención de cumplir la mitzva de hajnasat orjim,
La cual es la manera como se conducen los tzadikim en la vida: se puede traer otro ejemplo:
Ejemplo
El Rab Israel Abujatzira – llamado el Baba Sali – fue un conocido cabalista y un gran tzadik.
Cuentan sus allegados que él ponía mucho hincapié en la mitzvá de recibir invitados.
Es sabido que mucha gente iba a pedirle bendiciones y consejos todos los días, y a pesar de lo valioso que era su tiempo, él no escuchaba a la persona hasta que ésta haya probado una porción de torta.
Un día, llegó a él una pareja que se había casado dos días antes.
Ellos esperaron su turno e ingresaron para que el Baba Sali los bendiga.
Al escuchar que llevaban sólo dos días de casados, el Rabino llamó a su esposa y le pidió que haga entrar a todos los que estaban afuera esperando su turno, para que le canten a la nueva pareja.
La esposa rápidamente trajo tortas y bebidas,
Durante media hora, el Rabino junto con la gente, cantaron y alegraron al nuevo matrimonio, y luego el Rabino los bendijo.
Aprendimos
Aprendiendo de Abraham y todos los tzadikim, comprenderemos que, con buena predisposición y una sonrisa en nuestro rostro, tendremos el mérito de cumplir con esta importante Mitzvá,
Mitzvá que hemos heredado de nuestros patriarcas y sabios a través de las generaciones,
A la vez es un hecho que Adonai, a través de este gesto, nos llenara de grandes beneficios en este mundo y en el mundo venidero.
02 de noviembre de 2018
2 respuestas
Exelente enseñanzas
Apreciamos tu comentario. Si tienes alguna duda, háznola saber para colaborarte con la respuesta. Shalom y bendiciones